-Dos botellas del mejor vodka que tengáis, todo cargado a la cuenta de Gorgan Phylicks, por favor.-Dije, haciendo un juego de pestañeo para camelarme al camarerucho mugriento que, predeciblemente, aceptó ruborizado y nos entregó las botellas, dirigiendo una mala mirada a K`Dash.
-Tsk, nadie puede resistírseme... siempre consigo lo que quiero.-Dije bromeando, mientras ponía una falsa voz de egocéntrica.-Como diría Happy... ¡aye, a beber!.-Dije, dándole un trago a la botella hasta dejarlo a la mitad.